Visitas a las escrituras ~

miércoles, 31 de julio de 2013

Capítulo 17 - Los Lestrange~

24 de junio de 1992 # Estación de King's Cross




Querido diario, siento el retraso, y el no poder haber escrito antes... Podría ponerte la excusa de que la pluma se me había perdido, o quizá que la tinta se había terminado... Pero, ¿qué excusa podría funcionar en el mundo mágico?

No tengo mucho que contar. Simplemente estoy derrotada. Ya no estoy en Hogwarts, y eso se nota. Al menos puedo gozar de la soledad. Estoy en uno de los vagones del tren, escribiéndote todo lo que siento, al menos para poder intentar desahogarme con estos escritos.

Ya no está... Él ya no está... -Cerré los ojos- Y no podré verlo en mucho tiempo... -Esperar 3 meses. 3 nefastos y tardíos meses, que supuestamente se pasaban volando, o eso quería yo creer.- Supongo que lo único que puedo hacer es aprender a asimilarlo. De todas formas quizá el no verle me venga bien. Puede ser una buena manera de olvidarle. No verle, no sentirle, no oler su perfecta, hermosa, bella y pálida piel que a mí tanto me gusta contemplar. Sin embargo creo que esto empeorará la situación. Porque sé que así lo único que voy a hacer es pensar todavía más en sus labios y en su pelo. En todo él.


Eso sí, las vistas desde aquí son increíbles. Nunca antes me había fijado, la verdad. Creo que voy a ir dejándote ya, porque estoy muy cansada. Esta noche solo he dormido un par de horas, y no me veo capaz de soportar el trayecto sin sufrir pensándole. Es mejor no discurrir en lo que se me viene encima, así que espero escribir y contarte qué tal irán mis futuros días en la mansión de mi hermano, y su esposa. Hasta otra... -Se percibía a simple vista que la caligrafía y la forma de expresarme estaba siendo muy diferente a cómo lo era al principio. ¿Dónde había ido a parar aquella niña que siempre sonreía? Aquella niña que pasase lo que pasase siempre era feliz... Esos tiempos habían acabado, la nueva Susan había aparecido, y no era para nada lo que siempre esperé de mí misma. Mucho no podía hacer, aún era una cría y a penas tenía 11 años. Una muchacha de tal edad no podía asimilar según qué cosas. Por el amor de Merlín, estaban pidiéndome mucho al mismo tiempo.

De todos modos, había en mi interior una esperanza, confiaba en aquel hombre de gafas de media luna. Él sabía cuál era mi secreto, y me atrevía a afirmar que lo supo desde el principio, desde la primera mirada que le lancé a Snape. Sin duda era un hombre observador, inteligente, sabio. Lo tenía decidido, el año que viene hablaría con él, le contaría la situación. Quizá hasta podría aconsejarme o al menos alentarme diciéndome que tengo posibilidades. Aunque más bien creo que sería más sano que me olvidase de algo tan imposible como eso... Abrí los ojos cuando una ráfaga de luz naranja atravesó el cristal del ventanal, despertándome- 



El sol ya comenzaba a ocultarse, pero mis ojos de nuevo se cerraron, presos del cansancio- 

Solo le pediré una única cosa. http://img838.imageshack.us/img838/9036/56z.gif ¿De acuerdo? No cambiará su forma de ser, ni se dejará influir por los escarnios y las infravaloraciones de su hermano. Y por supuesto, tampoco dejará que la señorita Bellatrix, interfiera en sus pensamientos y deseos en ningún momento. -Le miré extrañada. No entendía nada.- Ahora no comprenderá lo que quiero decirle. Solo prométame que intentará hacer lo que le pido. 



Despídase de sus amigos, apunte direcciones, para poder enviar lechuzas este verano. Buena suerte. http://img837.imageshack.us/img837/6817/ct8.gif . -La puerta del despacho se abrió y un pitido molesto resonó, ocasionando que despertase de aquel recuerdo-

—Lestrange, despierta, hemos llegado. -Importunó una de mis compañeras de casa- 

—S... Sí... -Aún estaba medio dormida, me restregué los ojos, bostecé y me levanté algo aturdida, y cogí mi maleta. El tren ya estaba casi vacío, solo quedaba yo, la muchacha que me había avisado y ya se aproximaba a salir, y unos cuantos alumnos que bajaban. El viento entraba por la puerta del vagón, y batía mis cabellos. Cerré los ojos y suspiré. Aquello que estuve meditando durante tanto tiempo, cómo sería, cómo empezar una conversación... Cómo actuar con ellos... Un pie en el escalón, ya estaba fuera del tren, aún más lejos de Hogwarts... El andén 
9 ¾... Cerré los ojos al tocar por fin el suelo de la estación, y después de un rato, conseguí armarme de valor para abrirlos. El tren se marchó después de un pitido, y por sorpresa, la estación estaba vacía. La última familia que quedaba, había desaparecido por la pared evanescente. ¿Esto era una pesadilla?... Tragué saliva, di vueltas y vueltas sobre mí misma, intentando adivinar qué estaba ocurriendo.-




—¿Ro... Rodolphus? -Dije gritando, aunque tímida. No se oyó nada. Me quedé de pie, algo asustada. ¿Qué iba a hacer yo ahora?... Se les ha olvidado... Se les ha olviado que estoy aquí... Ya me abandonaron una vez. ¿Qué les importaría a ellos abandonarme de nuevo? Mi mente discutía consigo misma, pero el sonido de unos pasos a mis espaldas, rompieron ese silencio. http://img94.imageshack.us/img94/1430/susanlestrangex.gif  -

—Señorita Lestrange... -Dijo un hombre alto, vestido de negro, con guantes blancos y una gorra de piel. Agarró mi maleta y asintió- Vamos. -Se puso a caminar- Disculpe el retraso, su hermano tuvo complicaciones y la lechuza se retrasó. Creímos que llegaría una hora después.

—Oh... No... No se preocupe. -El hombre abrió la puerta del coche, yo entré y me senté detrás.- 

—Disculpe pues que tengamos que prescindir del transporte mágico. Su hermano me comentó que tiene usted... Vértigo. ¿No es así? 

—S... Sí... Así es... -Dije incómoda. Reposé mis manos sobre mi regazo, y suspiré- 

—Relájese, el camino no es muy largo. Está cerca de la mansión Malfoy. -El coche arrancó- 

—¿Malfoy? ¿Viviré cerca de la casa de Draco? -Abrí los ojos de par en par- 

—Mansión, -corrigió él- no les gusta que confundan. -Se giró, mirándome, bajó sus gafas de sol hasta su tabique nasal, y se quedó perplejo mirando mis ojos- Vaya. Tiene usted los ojos del señor Lestrange. 



—¿De mi hermano?... -Me encogí de hombros- No sé... A... Aún no lo conozco... 

—No, no. De vuestro padre. Una lástima que falleciera. -Se giró con normalidad, se acomodó en el asiento, y continuó el viaje. Tragué saliva al escuchar aquella noticia, y me quedé absorta de todo, observando la luna llena en la ventana.- 



—¿Ha... Hace mucho que... Murió?... 

—No mucho. Dos meses, ¿tal vez? No lo recuerdo del todo. La señora Lestrange ni se lo creía. Fue una gran pérdida. 

—¿Ella sigue viva? 

—Más o menos. -Miró por el retrovisor, en el cual se iluminaba mi rostro, pálido por la tenue luz de la luna- Su marido ha muerto, y parece ser que no lo asimila. No está del todo "viva". Mire, -señaló a lo lejos- Ahí está su nueva casa.  




—Me alegro de que sí lo esté... -Respiré tranquila, al menos podría conocer a mi madre. Preguntarle cosas...Después de un rato, el coche se detuvo.-

—Aquí es. -Salió del coche, abrió el maletero y sacó las maletas. Después quitó el seguro de mi puerta para que pudiese salir- Bienvenida a casa, señorita Lestrange. -Ambos nos dirigimos hacia la entrada, la puerta se abrió de par en par y entramos. -



miércoles, 24 de julio de 2013

Capítulo 16 - Rumbo a casa~

24 de junio de 1992 # Castillo de Hogwarts

—Despiértate, Lestrange. Es casi la hora del desayuno y no has preparado ni el equipaje. Comprendo que quieras quedarte en Hogwarts, pero me temo que no puedes. -Exclamó Pansy con una mirada de odio y desprecio. Parecía que esa chica nació con esa cara de amargada. Siempre tenía el mismo malhumor.

 
Me he quedado dormida. Y eso que pensaba que no conseguiría hacerlo... Al final resultó ser inevitable. Pensé, y casi me costaba despegarme de las sábanas, aún sentía que los párpados me pesaban. Definitivamente me estiré un par de veces en la cama, me levanté poco a poco, un tanto aturdida, y desvié mi mirada hacia el ventanal. El sol de la mañana se filtraba entre el agua del lago. Esta vez no tenía tiempo de quedarme a disfrutar de tal imagen. Y el recordar que estaría mucho tiempo sin poder hacerlo, me estaba envenenando por dentro.


Después de haber estado 10 minutos discutiendo conmigo misma, comencé a recoger la ropa que había sobre la cama y en parte de la habitación. Abrí los cajones de la mesita y saqué todas mis cosas. Entre ellas, mi diario, que incluso se había llenado de polvo. Lo retiré con mis dedos índice, corazón y anular, y lo abrí. Pasé las páginas rápidamente, hasta encontrar la última escrita, y al lado, una en blanco.-


—He estado tan preocupada por los exámenes que se me había olvidado que estabas ahí... Y la verdad es que no tengo muy buenas noticias que contarte... Pero de todos modos, como no tengo hambre y es la hora del desayuno, me entretendré escribiendo en el Gran Comedor contándote todas mis desdichas. -Cerré el diario y lo dejé sobre la cama, que acababa de terminar de hacer. Mi maleta ya estaba preparada y quedaban apenas 10 minutos para que diese comienzo el desayuno. Al darme cuenta de que ya tenía todo listo por fin, comencé a caminar hacia el Gran Comedor, que se hallaba abarrotado de alumnos y profesores. Al llegar allí, me acordé de que el diario se me había olvidado por completo. Lo había dejado sobre la cama. Maldición... Pero ya era tarde, ya estaba en el interior del Gran Comedor, y al parecer todos estaban felices de acabar el curso. En cambio, en mí era todo lo contrario. Me senté al lado de Draco como de costumbre, y le miré sonriendo.- ¿Qué tal todo, Draco? ¿cómo has despertado hoy?

—Feliz por saber que por fin me largo ya de aquí. -No me miró, dedicó toda su atención al desayuno, y a devorar la comida que tenía frente a sus narices.-

—Pues yo no estoy nada feliz... -Apoyé mi mejilla sobre la palma de mi mano. Draco no contestó, continuó comiendo como si no hubiera mañana. Parecía estar muy hambriento. O tal vez el desayuno de hoy era especial. No lo sabía porque no pensaba probar bocado.- Y... ¿Quién vendrá a recogerte?

—Mi padre y mi madre. ¿Quién sino? -Pronunció sin casi entenderse lo que decía. Con los restos de comida masticados bailando entre sus dientes y su lengua. Mi gesto cambió completamente a incómodo, con un gesto de repulsión.-

—¡No hagas eso! -Curvé los labios y fruncí el entrecejo. Qué molesto era aquello...- ¡Me molesta muchísimo!

—¿Y desde cuando a mí me importa lo que a ti te moleste? -Continuó hablando con la boca llena.- Cierra el pico y si no te gusta, no mires. Tápate los oídos o lárgate.

—¿No decías que en tu familia eran todos muy educados?... Pues ahora pareces de todo menos eso. -Bajé la mirada con timidez, sonrojándome. Draco se quedó callado y continuó comiendo más despacio, como si lo que yo le hubiese dicho le hubiera hecho darse cuenta de que yo llevaba razón. Mi mirada se desvió a un par de mesas más adelante, donde se hallaban los Gryffindors. Ahí estaba de nuevo Potter y el pelirrojo. Merlín... Éste comía aún peor que Draco... Incluso parecía estar jadeando cual perro al que acababan de colocarle el pienso o un buen filete. Y no solo tenía una alita de pollo, sino que tenía dos. ¡Una en cada mano por el amor de Merlín! ¿No se ahogaba?...-

—Al parecer Weasley está aprovechando el tiempo. Me imagino que en su casa lo único que puede permitirse comer es el pellejo de ese pollo... -Rió Draco ésta vez sin restos en su boca, ni masticados ni triturados.-

—Draco... Eso es inapropiado... -Le miré un tanto enfadada. No me gustaba que se metiesen con los demás. Y aún menos que le titularan como “pobre”. Yo lo era... Y en mi cobertizo vivía casi medio poblado. Todos lo compartíamos todo. Me sentía identificada con aquel chico de pelo rojizo.-

—¿Qué más da? Toda su familia es pobre. ¿Sabías que duermen todos en un cuarto? Menudo asco... Compartir habitación con todos los que son. Aún no sé cómo pueden mantenerlos a todos. Morirán de hambre seguramente. Túnicas de segunda mano, libros ajados... -Enseguida interrumpí.-

—Basta, Draco. No sigas. A mí no me parece tan malo como para que estés diciendo todas esas cosas de él. Tiene cara de ser buena persona. No puedo ver la maldad en su rostro. -Le miré, ahora hablaba con Potter, y ambos reían.-

—¿Y tú qué sabrás? ¿Desde cuando defiendes tú a esos dos? -Me miró con rabia y repulsión.-

—¿A qué dos?... Si solo he dicho que Weasley... -Draco interrumpió.-

—Ya sabes a lo que me refiero. Si defiendes a un idiota, defiendes al otro idiota. Ya sabes. A Potter. Vienen en el mismo pack. Y esa asquerosa sangre-sucia de Granger. -Dejó caer el tenedor en el plato con enfado.- Nunca serás una verdadera Lestrange. Y menos comportándote así. ¿Qué demonios haces en Slytherin?

—¡Pues para tu información!... -Me quedé callada, notaba ya aquel escozor en los ojos e irritación en las cavidades nasales alertándome de que el llanto se aproximaba. Me levanté de la mesa rápidamente y corrí hacia mi habitación. Envuelta en sollozos y lágrimas. Que resbalaban por mis cetrinas mejillas. Me dejé caer boca abajo en la cama, y me desahogué hasta que pude, porque otra vez estaba allí Pansy, que sin importarle lo más mínimo verme de ese modo, empezó a ordenarme que agarrase mi maleta y bajase rápidamente hacia el cobertizo. Los botes ya estaban listos, y el tren estaba a punto de llegar. Sin muchas ganas, hice lo que me mandó, y bajé hasta allí. Corrí por los pasillos lo más rápido que pude. ¿Te imaginas que ahora perdieras el tren, Susan? ¿Te imaginas que pudieses quedarte en Hogwarts gracias a eso? .Un gran impacto hizo que dejase de hablar en mis adentros.-



—Vaya con... Cuidado... Señorita Lestrange... -Snape se sacudió la túnica, y me miró seriamente. Apretó los dientes un momento, http://img153.imageshack.us/img153/5322/snarry.gif y elevó la barbilla, mirándome. http://img69.imageshack.us/img69/2112/snapesevrs.gif- Me imagino que sus prisas se deben al miedo de perder el tren... ¿Me... Equivoco?... -Arqueó la ceja.- 

—Eh... Ehm... S... Sí pr... Profesor... Yo... Lo... Lo lamento, no... No estaba a... Atenta... - Maldita sea, ¡Susan! ¡Deja ya de tartamudear! ¡Se va a dar cuenta!-
—Le recomiendo... Que se de usted prisa por llegar a tiempo al... Tren... Y... Le aconsejo que este verano repase y estudie pociones. No le vendrá mal una revisión... http://img594.imageshack.us/img594/945/stalk.gif

—Claro, profesor. Estudiaré. -Asentí, nerviosa.-

—Vamos. Váyase o llegará tarde. Los botes ya están... Preparados. Que pase un buen... Verano. http://img855.imageshack.us/img855/921/snapewalkaway.gif -Con la capa arremolinándose a los talones, se fue de allí. Suspiré lentamente, cerrando los ojos, y volví a correr hacia el cobertizo.-

—¡Vamos, Lestrange! -Dijo Draco ya subido en el bote, aún quedaban algunos alumnos de Ravenclaw, al menos me había dado tiempo...-

—Estaba en... -Alcé mi dedo pulgar señalando a mis espaldas, pero no dije nada más. Me subí al bote sin rechistar. Poco tiempo después, llegamos a la estación cercana a Hogwarts. Otra vez allí... Pero esta vez no sería Transilvania... Esta vez no. Y quizá si lo hubiera sabido antes, no se me hubiera ocurrido siquiera aceptar la proposición de la carta. Y te hubieras dispuesto a no conocer jamás a Snape, ¿Susan?. Discutió la voz de mi interior conmigo misma.- Tienes razón... -Dije musitando.- Quizá esto haya sido solo el destino... -Bajé del bote y caminé hacia el tren. Noté algo raro en mi zapato, así que me detuve un momento y me lo quité. Al darle la vuelta, una piedrecita cayó al suelo. Me giré, ya casi estaban todos subidos y asomados a las ventanas del ferrocarril. Excepto Potter. Estaba... ¿Hablando con Hagrid? Le había entregado algo. Parecía ser un álbum... http://images5.fanpop.com/image/photos/25900000/Lily-and-James-with-baby-harry-lily-and-james-potter-25980478-500-291.gif Finalmente se abrazaron, y se despidieron http://25.media.tumblr.com/tumblr_lo2rcm1mD01qf7klco1_500.gif . Cuando aquel chico de ojos verdes pasó por mi lado, me quedé mirándole fijamente, siguiéndole con la mirada.-
—¡Vamos, señorita Lestrange! ¡No querrá perder el tren! -Dijo Hagrid aguantándose las lágrimas. Supuse que sería por Potter. Así que asentí con educación y subí al tren, sentándome en uno de los vagones vacíos que había. Necesitaba estar sola y aclarar mis ideas y pensamientos...- http://goodbooksandgoodwine.com/wp-content/uploads/2012/06/tumblr_m5d6m1IMfE1r81kbyo1_500.gif






miércoles, 17 de julio de 2013

El último día del curso ~ { 3ª parte }

23 de junio de 1992 # Gran comedor. 


-Bajé las escaleras del despacho de Dumbledore, y de nuevo, la gárgola habló en cuanto se situó en su lugar.-

—¡Señorita Lestrange!

—¿S... Sí?... -Dije sin saber muy bien qué podía querer aquella estatua esta vez de mí.-

—¿Qué tal ha ido? -Expresó ésta con un tono interesado.-

—No me ha contado nada que no supiese ya... -Pero después recordé.- Bueno... Quizá algo sí. Pero más o menos ya sabía qué era lo que me tenía que decir. Y no estaba equivocada...

—¡Vaya! Bueno, pues, ¡le deseo un verano extraordinario, señorita! -La gárgola carcajeó felizmente, como despedida.-

—Gracias... -Bajé la mirada, y continué mi camino, no sabía muy bien a dónde... Dumbledore me dijo que me despidiese de mis amigos y que apuntase direcciones. La débil sonrisa, casi invisible que se mostraba en mi rostro, se retiró por completo al recordar las los consejos del director. ¿A qué amigos?... Dije para mí misma. Me quedé parada, observando una pared vacía. Cerré los ojos, y caminé hacia los terrenos del castillo. Me apetecía estar sola.

Después de estar durante largo rato caminando hasta llegar allí, me senté sobre una roca en el círculo de piedra. Las lechuzas y las demás aves volaban sobre mi cabeza. No tenía muy claro que iba a hacer. Puesto que aún ni conocía a mi hermano... ¿Cómo reaccionar? ¿Cómo empezar una conversación?...-

—Hola, Rodolphus... -No, eso no... Es demasiado seco...- Hola, mi nombre es Susan. ¡No, no! Tampoco... Él ya sabe como me llamo... -Bajé la mirada, estrujándome la cabeza. Parecía extraño, pero me estaba complicando la cabeza por un simple saludo de iniciación... Suspiré hondo, y me levanté de la roca en la que estaba sentada, bajé la pequeña cuesta, dirigiéndome al interior del bosque, y allí estaba la caseta de Hagrid, el guardián de los terrenos. Un hombre bastante... Alto. 
Tumbado frente a la caseta, se hallaba Fang, un perro jabalinero de color negro azabache. Me acerqué a él, y me acuclillé a su lado, acariciando su gran cabeza. Éste la alzó y me miró, lamiendo su gran hocico. 


La puerta de la cabaña, se abrió de golpe, chocando con la pared de ésta, y apareció un hombre alto, con una barba.-

—¿Lestrange, me equivoco? -Sonrió amable “el gigante”.-

—Sí... Susan. Susan Lestrange. -Asentí, un tanto vergonzosa. Me levanté, y dejé de acariciar al perro.-

—¿Y qué haces que no estás en el gran comedor? ¡Está a punto de anochecer! Y en breves comenzará la celebración de final de curso. ¿No tienes curiosidad por saber quién ganará la copa este año? -Se acercó y asintió sonriendo.-

—Bue... Bueno... No es algo que... -Me encogí de hombros.- Supongo que iré subiendo ya, sí... -Bajé la mirada sonrojada.-

—¡Claro que sí! -Se sentó en las escaleras de su cabaña, y comenzó a tocar una melodía con su flauta.-



—Hasta el año que viene, señor. -Dije mientras caminaba hacia la cuesta.-

—¡Hasta el año que viene, Lestrange! ¡Que pase un espléndido verano!

—Lo intentaré... -Murmuré cuando ya no me escuchaba, subí de nuevo aquella cuesta, y pasé por el puente, sin muchas ganas. El sol caía y ya comenzaba a desaparecer entre las montañas.



Llegué hasta el vestíbulo, y la puerta del comedor ya estaba abierta. Y a decir verdad, estaba a rebosar de gente. Todos los alumnos, o al menos casi todos, ya estaban allí, sentados en sus puestos, cuchicheando sobre la copa de la casa. Me acerqué a la mesa de Slytherin, y me senté junto a Draco.-

—¿Qué hay, Lestrange? ¿Estás nerviosa? -Dijo Draco, mirándome.-

—¿Por qué habría de estarlo?... No me interesa quién gane la copa... -Tenía otras cosas por las que preocuparme, una copa no iba a cambiar nada.-

Eres muy aburrida. -Me dirigió una mirada de aversión.- Pues yo espero que gane Slytherin. -Miró hacia el techo, en el que colgaban las banderas de nuestra casa http://fc05.deviantart.net/fs71/f/2013/104/5/d/slyth_by_harrypotterised-d61p0km.gif .- ¿Qué harás este verano, Lestange?


—Nefastos planes. No tengo ganas de hablar de eso, Draco... Por favor... -Intenté desviar el tema, lo último que me faltaba era recordarlo durante toda la cena.- ¿Qué es ese sombrero que llevas?... Ese... Gorrito. -Lo señalé con extrañeza.- 

—Deberías llevarlo tú también. Es el final de curso, todo el mundo lo lleva puesto. -Y era cierto, todos lo llevaban, excepto yo, que se me había olvidado. Bajé la mirada, y las puertas se cerraron al entrar el resto de alumnos. Comenzamos a comer, pero una copa que la profesora McGonagall golpeó suavemente con su cuchara, resonó en todo el comedor. El director se puso en pie, y comenzó su discurso.-


—Otro año, se va. Y según es costumbre, la copa de la casa ha de ser entregada. La puntuación es la que sigue; En cuarto lugar, Gryffindor, con 312 puntos. -En aquel momento, Draco sonrió con malicia, observando la mesa de los Gryffindors.- En tercer lugar, -continuó Dumbledore.- Hufflepuff con 352 puntos. En segundo lugar, Ravenclaw, con 426 puntos. Y en primer lugar, con 472 puntos, la casa Slytherin. -Draco comenzó a aplaudir y a gritar, destrozándome los oídos, y a mis lados, Crabbe y Goyle. Ambos abriendo la boca como dos puercos hambrientos y felices. Miré hacia la mesa, y al parecer, Snape estaba aplaudiendo. Pero seguía con una expresión seria, era tan extraño... http://25.media.tumblr.com/tumblr_m5z63lxI4D1rxfxd3o1_500.gif Reí para mis adentros.- Sí, sí, bien hecho, Slytherin, enhorabuena... ¡Sin embargo! Acontecimientos recientes, han de ser tenidos en cuenta, y tengo que conceder, unos puntos de última hora. A la señorita, Hermione Granger, por el uso de la fría lógica, cuando otros estaban en peligro: 50 puntos.
Segundo, al señor Ronald Weasley, por la mejor partida de ajedrez, que Hogwarts ha presenciado en su larga historia: 50 puntos. Y tercero, al señor, Harry Potter, por su temple, e incuestionable valor, recompenso a la casa Gryffindor, con 60 puntos. Y para finalizar, hace falta mucho coraje para enfrentarse a los enemigos pero... Mucho más para hacerlo contra los amigos. Premio por ello, con 10 puntos al señor: Neville Longbottom.
Así pues y si mis cálculos no son erróneos, me parece... Que hay que hacer un pequeño cambio, en la decoración. -Dio una palmada, y las banderas que colgaban del techo, de color verde, se transformaron en unas de un color rojizo y amarillo.- Gryffindor gana, la copa de la casa. -Los Gryffindors se levantaron de la mesa y felices festejaron su logro. Todos lanzaron sus gorros, excepto los de mi propia casa. Draco en cambio, se lo retiró y lo dejó en mis narices, con enfado. Pero yo me abstuve de todo... Tan solo observaba a Snape. Aquella noche sería la última durante mucho tiempo en la que podría disfrutar de sus facciones. Me indigné a comer nada, me deleité con sus rasgos... Con su rostro y sus labios... Sus ojos, su cetrina piel que a mí tanto me gustaba... Sus cabellos negros azabache, que tanto yo anhelaba poder acariciar. Slytherins malhumorados, Gryffindors jubilosos, Ravenclaws complacidos, Hufflepuffs conformes, y yo... Absorta de todo aquello. La única sensación de competencia, la tenía mi cabeza con mi corazón, y mis deseos, que libraban un duelo intentando decir qué eran más bonitos, si los ojos del profesor Snape, o sus labios.


Me levanté cuando todos terminaron, pero aún seguía mirándole, hablando con Dumbledore, apostaba 100 galeones a que mi rostro en esos momentos denotaba un extremo enamoramiento. Y Dumbledore pudo darse cuenta de eso en cuanto me miró, y se dio cuenta a quién iba dirigida mi mirada, sonrió como si él mismo hubiese por fin afirmado sus sospechas. En cuanto éstos se retiraron, yo hice lo mismo, con lentitud, hacia mi sala común, no dormiría aquella noche, lo sabía... 

Todas mis compañeras ya se hallaban dormidas, en sus respectivas camas, y yo me senté frente al gran ventanal, observando otra vez las vistas del lago, y las partículas que de nuevo, lograba ver formando el rostro de Snape. Abracé mis rodillas, soñando despierta. Disfrutando de los últimos momentos que me quedaban en aquel castillo. Ahora era cuando comenzaba a echar de menos todo lo vivido... Y es que no me paré a pensar lo tremendamente feliz que fui durante todo el curso, hasta que terminó... Porque cuando las cosas comienzan, no te das cuenta de que algún día tienen que terminar, y es cuando acaban, cuando comienzas a recordar cómo empezaron... Solo me quedaban los recuerdos, las clases y la voz de Snape. Todo aquello, para poder sobrevivir durante el verano que me esperaba. Un fatídico, ominoso, y funesto, verano... 

miércoles, 10 de julio de 2013

El último día del curso ~ { 2ª parte }

23 de junio de 1992 # Despacho del director.

-Contemplé al director mientras se deslizaba al interior de la enfermería. Me quedé unos segundos quieta, aislada durante un segundo. Me había quedado pasmada. 
Rápidamente y según me había indicado Dumbeldore, que por mis observaciones, no tardaría mucho en hablar con Harry, me encaminé hacia su despacho.- A ver, Susan... Ubícate... Estás en el cuarto piso. Y tienes que ir hasta el tercer piso para llegar al despacho de Dumbledore. -Observé durante unos minutos el lugar en el que me hallaba.- Está bien... Tan solo tengo que bajar las escaleras, y girar hacia la derecha... Espero no tardar mucho... Las condenadas cambian a placer... -Y así lo hice. Bajé un par de escalones, un tanto mareada. Tenía vértigo, cada vez que me aferraba a las barandillas de esos escalones para no caerme, y veía lo alto que estab aquello, comenzaba a verlo todo borroso, y me mareaba. Al fin en tierra firme, me deslicé aún un poco aturdida hacia el despacho. En cuanto avancé un poco, ya comenzaba a ver una escalera de caracol de piedra, oculta por una gárgola.- Maldita sea... ¡No recuerdo la endiablada contraseña! -Y en aquel momento, la gárgola que impedía mi entrada inmediata en el despacho, comenzó a hablar.- 

-¡Señorita Lestrange! -Dijo con admiración. Yo brinqué, sobresaltada como nunca antes. Empalidecí por momentos. Sentía de nuevo las pulsaciones aceleradas.-

-¡Por merlín! ¡No sabía que pudieras hablar! -La gárgola rió, sintiéndose subestimada.- 

-¡No me digas! Que nunca hable no quiere decir que no pueda hacerlo. ¡Sería la única gárgola de este colegio que no pudiera hacerlo! ¿No te parece eso un poco avaro? 

-N..No... ¡Osea, sí! Lo siento, es que estoy algo nerviosa... 

-¡Y tienes que estarlo! ¡Para venir al despacho del director! ¿Qué has hecho ya, joven Lestrange?

-N...Nada... ¡Dumbledore me dijo que viniera! -Me sonrojé de inmediato. Mis mejillas ardían, incluso el rubor se extendió hacia mis orejas. La gárgola de nuevo echó a reír.- 

-Tranquila, Lestrange. Ya te esperaba. ¡Estaba bromeando! ¿No conoces la contraseña, eh? Albus te dijo que vinieras sin decírtela... Está mayor. -Rió de nuevo.- 

-Vaya... E...Eres una... Una gárgola muy... Risueña... -Continué tímida.- Pero tienes razón... Dumbledore no... No me dijo la contraseña... 

-¡No hay ningún problema! -Aquella gárgola sin duda, pegaba unos berridos impresionantes... Casi me recordaba al sombrero seleccionador.- Pasa, joven Lestrange. ¡El director ya te espera! -La gárgola se hizo a un lado, y dejó mostrar la escalera de caracol.- 

-¡¿Qué?! -Dije soprendida.- ¿¡Cómo puede ser!? Pe... Pero... Pe... ¡Pero si el director estaba hablando con Potter! Yo... Yo... -La gárgola interrumpió.- 

-Se nota que aún no conoces a Albus. -Rió por última vez, y yo, no sabía si decidida del todo, comencé a subir las escaleras, intenté no mirar mucho a aquella gárgola, me intimidaba... Temía que me diese un grito al enontrarme con ella al final de la escalera. Pero no fue así, guardó silencio, y yo ya podía ver la larga barba blanca del director, y sus gafas de media luna. Entré en su despacho, con cautela, y sobre todo, manteniendo un alto respeto.-

-¿Profesor?... -Me asomé a la puerta.- ¿Puedo pasar?... 

-Señorita Lestrange. http://img507.imageshack.us/img507/9287/pcb.gif No la esperaba tan pronto... Me agrada saber que es usted puntual. Claro, por favor, pase. -Entré por fin en despacho, era una gran sala circular con muchas ventanas y muchos retratos de directores y directoras de edad.-

-¡Vaya, vaya, vaya! ¡Aquí la nueva Lestrange! -Musitó el sombrero, desde una de las repisas. Yo lo miré rápidamente.- Al parecer sí es como los de su familia. ¡Y nos traerá problemas desde el principio! http://media.tumblr.com/tumblr_lnv8fayaZ51qcr41p.gif 



-Tranquila, señorita Lestrange. http://img23.imageshack.us/img23/4636/kyrf.gif -Miró al sombrero, y con esa sola mirada, éste se cayó, no conforme, cerró los ojos, y se puso a dormir. Entonces el director, me miró sonriente, se acomodó en su asiento, y musitó.- No tiene por qué estar nerviosa, señorita. Siéntese. -Hice lo que me pidió, y le miré, apoyé mis manos en mis rodillas, y apreté los labios, intentando relajarme.- 

-Dígame,  profesor... 

-Como ya sabrá, este año no volverá a Transilvania. -No intentó suavizarlo. Por lo visto, prefirió decírmelo cuanto antes, para que pudiera asumirlo.- 

-Algo así me habían dicho ya... -Bajé la mirada.- 

-Sé que para usted será difícil no ver a su familia este año. Pero como comprenderá no lo hacemos por gusto. http://img28.imageshack.us/img28/2051/7si.gif

-¿Y entonces por qué lo hacen? -Dije un tanto molesta, sabía que no había razones suficientes. Y eso me molestaba. Quise gritarle, pero la educación que mi familia me había atribuido, me lo impedía.-

-Supongo que durante este curso, habrá oído algo sobre su verdadera familia. -Yo asentí, aunque seguía irritada.- Viven en Londres, cerca de la mansión de la familia Malfoy. 

-¿Qué quiere llegar a decirme con todo esto?... -Dije débil. Sabía que no volvería. Pero quería que el trámite fuese lo más rápido posible.- 

-No podíamos dejarla en Transilvania... Usted es una bruja. Familia de unos magos bastante conocidos. Y no se imagina, lo que nos costó que recibiese la carta. -Le miré extrañada.- 

-¿No sabían dónde me encontraba? -Pregunté extrañada.- 

- http://img62.imageshack.us/img62/9821/bq6.gif No se trata de eso, señorita Lestrange. Rumanía, y en especial Transilvania, adopta un clima muy alto, la nieve es más espesa. Y está muy lejos de aquí. Murieron tres lechuzas durante el trayecto. -Me congelé de inmediato. Sentí tristeza, dolor... Esas lechuzas habían muerto por mi culpa...- No se martirice... -Insistió Dumbledore.- 

-Y... ¿Cómo entonces llegó mi carta?... -Tragué saliva.-

-Hubo en especial... Una lechuza que... http://img825.imageshack.us/img825/4950/1unr.gif De alguna manera luchó por que usted recibiese esa carta... -Achiqué los ojos y fruncí ligeramente el entrecejo por unos segundos.- ¿Se imagina de quién podría ser? -Negué lentamente, achicando los ojos.- Venga conmigo. -Se levantó de la silla, se dirigió hacia uno de los armarios de su despacho, y con un movimiento de varita, apareció una pileta poco profunda de piedra decorada con runas y símbolos. Su interior estaba lleno de una sustancia de aspecto fluido gaseoso tipo vaporoso.- ¿Sabe qué es esto, señorita Lestrange? 

-No, señor... -Le miré, dubitativa.- 

-Esto, señorita. Es un pensadero. Sirve para revisar recuerdos, o en ciertos casos para despejar la mente. Quiero que recuerde la noche en la que recibió la carta, e introduzca la cabeza en esta superficie. ¿De acuerdo? 

-Pero... 

-Confíe en mí, señorita Lestrange. Quiero que vea una cosa. -Asentí, tragué saliva. Le miré, e introduje mi cabeza en aquella agua azulada. Unas sombras negras empezaron a caer en el fondo. Sentí que mis pies se despegaban del suelo, y aparecí en la choza en la que meses atrás, estaba viviendo.-

31 de junio de 1991 

Cobertizo de la Roca. 




Era una noche fría, y no era de extrañar... En Transilvania siempre nevaba, siempre hacía frío... Estábamos a punto de quedarnos dormidos. Cuando el murmullo de un hermoso pájaro, golpeando con su pico, la madera de la choza, me despegó de aquel sueño, acabando por completo con la quietud callada. Abrí los ojos de par en par, quedando atónita. Una preciosa lechuza enorme, se quedó quieta mirándome, en silencio. Miró hacia el suelo, en el cual había un sobre. Ululó, indicándome que lo cogiese, y así lo hice. Despegué el sobre con cuidado, y ésta, se quedó observándome.




Despegué con lentitud y cuidado y saqué la carta. Comencé a leerla, sorprendida.- 



 -Parecía que el corazón se me aceleraba... ¿Magia? ¿Eso existía de verdad?... Le di la vuelta a la carta, allí estaban todos los materiales necesarios...- 




Desperté a mis "padres" y les comenté lo sucedido. Ellos no insistieron en que me marchase, pero tampoco en que me quedase... En seguida me despedí de ellos a duras penas. En la entrada, un gran caballo negro, Transilvano. uno de los más rápidos del mundo, esperaba a que montara sobre él, para llevarme hacia el aeropuerto de Rumanía, hasta Londres. 

Durante el trayecto, me pareció ver en más de una ocasión, a un hombre de gafas de media luna, con una barba larga y blanca. Pero al mirar hacia su silueta, ésta desaparecía... Y aquella lechuza, no dejó de mirarme ni un solo momento. Viajó sobrevolando al lado del caballo.-



-Bien, señorita Lestrange... Dígame. ¿Qué ha visto? -La voz de Dumbledore, me avisó del momento en el que tenía que sacar la cabeza de la pila.-

-Le vi a usted, profesor. Usted era el hombre que aparecía y se desvanecía... 

-Cierto. Yo estuve ahí. Pero no es eso a lo que me refiero... Cuénteme... ¿No había ninguna lechuza? La lechuza que le entregó la carta. ¿Cómo era?

-Era... Grande... Muy grande... Negra. Oscura... 

-¿No se imagina de quién puede ser esa lechuza?...  http://img507.imageshack.us/img507/9287/pcb.gif -Yo, negué lentamente, achiqué un momento los ojos, y tragué saliva. No podía ser...- 

-No lo sé, señor. -Necesitaba que fuese él quien me lo desmintiera.- 

-Del profesor Snape. 

¿De Snape? -Me atraganté al tragar saliva, y comencé a toser, ocultando mis labios con el puño cerrado.- ¿Del... Del profesor Snape? -Continué tosiendo, con menor regularidad. Carraspee, finalizando aquella tos.- ¿El... El lo sabe?

-No lo sé, señorita Lestrange. http://img62.imageshack.us/img62/9821/bq6.gif . Su lechuza viajó sola. No sabemos ni cómo, ni por qué. 

-Va...Vaya... -Dije aún sin creérmelo.- Eso es muy extraño, señor... 

http://img507.imageshack.us/img507/9287/pcb.gif . No hay nada extraño en la magia, señorita... http://img837.imageshack.us/img837/6817/ct8.gif . Pero no estamos aquí para hablar de eso. ¿Verdad? http://img41.imageshack.us/img41/1934/n1f.gif 

Claro que no, señor... -Asentí.- 

-Bien... Este verano, se marchará con su hermano, Rodolphus. Y con su esposa, Bellatrix. Escúcheme, señorita Lestrange. -Dijo serio.- Le costará acostumbrarse... Créame... Pero eso le hará más fuerte. Tiene que aceptar sus responsabilidades. Su verdadera familia... A pesar de lo que haya ocurrido años atrás... Es su familia... Y tiene que aceptarlo. No puede depender siempre de los señores Valerius. 

-Lo entiendo, señor... 

-Solo le pediré una única cosa. http://img838.imageshack.us/img838/9036/56z.gif ¿De acuerdo?

-Sí, señor...

-No cambiará su forma de ser, ni se dejará influir por los escarnios y las infravaloraciones de su hermano. Y por supuesto, tampoco dejará que la señorita Bellatrix, interfiera en sus pensamientos y deseos en ningún momento. -Le miré extrañada. No entendía nada.- Ahora no comprenderá lo que quiero decirle. Solo prométame que intentará hacer lo que le pido. 

-Lo intentaré, señor. -Dije aún extrañada.- 

-Bien... Puede retirarse, señorita Lestrange... Despídase de sus amigos, apunte direcciones, para poder enviar lechuzas este verano. Buena suerte. http://img837.imageshack.us/img837/6817/ct8.gif . La puerta del despacho, se abrió de nuevo, la gárgola estaba allí, esperándome para bajar, y así lo hice.- 

-Pobre muchacha... -Dijo Dumbledore, sin que yo pudiera oírle. Y en seguida, comenzó a escribir en un pergamino.- 


miércoles, 3 de julio de 2013

Capítulo 15 - El último día del curso~ {1ª parte}

23 de junio de 1992 # Pasillos de Hogwarts


Nervios. Nervios era lo que yo sentía en aquel momento... Era el último día. Nada más y nada menos que el último... Y yo aún seguía sin saber a dónde iría. 

Sentada en uno de los sofás de mi sala común, meditaba ya, cómo sería mi familia... Mi verdadera familla, Merlín... No quería ni imaginarlo... Según la forma en la que reaccionó Draco cuando le mencioné mi apellido, juraría que no son para nada amistosos... 




¿Una Lestrange? Eres demasiado amable para ser una Lestrange... 

Me sentía incómoda, demasiado... Nunca me había gustado eso de conocer gente nueva. Y menos aún, sabiendo cómo me trataron siendo incluso de su misma sangre... ¿Por qué me tocaba a mí esto? ¿Por qué lo hacían?... Seguro que ni siquiera había un motivo razonable para todo eso... http://img543.imageshack.us/img543/736/kh6j.gif . Definitivamente, me levanté del sofá y subí los 8 escalones, dirigiéndome al interior de las mazmorras.
A mi al rededor, todos mis compañeros reían, comentaban lo que harían este verano, se prometían enviarse lechuzas durante todas las vacaciones. Y aquellas palabras entraban en mi cabeza, ocasionándome un molesto dolor en el pecho. Quizá era envidia, quizá lástima por mí misma. No lo sabía... Tan solo lo sentía...

-Este verano, viajaré con mi familia al Caribe. ¡Espero no quemarme! -Dijo una alumna, con una profunda alegría, acabando con una risa.-

-¿Y qué me dices de los tiburones que hay por esas aguas? ¿No te dan miedo? ¡He oído que son enormes! -Le acompañó una de sus compañeras.- 

-¿Tiburones? ¡Me dan más miedo los muggles! -Ambas rieron, y desaparecieron por uno de los pasillos de las mazmorras. Yo seguía sumergida en mis pensamientos, aunque alguna que otra vez, la palabra familia se entrelazaba en mis reflexiones. 
Me detuve de perfil, a la puerta de pociones. La miré de soslayo http://img94.imageshack.us/img94/1430/susanlestrangex.gif y miles de recuerdos golpearon mi mente. 



Negué un par de veces, despejándome de aquellas imágenes, y me decanté por seguir adelante. Para conseguir serenarme, y olvidarme por un momento de él, al menos, durante un rato. Decidí contar los escalones de la escalera que comunicaba con las mazmorras y la entrada del viaducto.- 

-Cincuenta y cuatro. Cincuenta y cuatro escalones... -Dije suspirando. Aunque de nada me sirvió aquello, porque en cuanto terminé de contarlos, de nuevo me acordé de él...- Maldita sea. ¡Es imposible! -Bufé. exasperada.
Ese día no había clases, así que me dispuse a pasear por el castillo, antes de marchar. Al menos disfrutaría de aquel lugar... Sabía que lo echaría de menos... 
Caminé hacia el primer piso, hasta llegar al cuarto. El sol se filtraba en los grandes ventanales.



Llegué hasta la torre del reloj, y me entretuve observando la gran manecilla del reloj, moviéndose lentamente de derecha a izquierda. Aquello al menos me relajó durante unos minutos. Suspiré cerrando los ojos, dejando que el viento acariciase mis mejillas y mi piel, y se llevase consigo mis preocupaciones. Aunque eso solo durase unos segundos... Aquellos en los que disfrutaba de aquellas caricias...
Me di la vuelta, contemplando el final del pasillo, miré una última vez a aquel reloj, acaricié la barandilla y empecé a caminar en dirección opuesta. Al pasar frente a la puerta de la enfermería, pude darme cuenta, de que había un alumno tumbado en una de las camillas. 




Me acerqué un tanto, colocándome tras la puerta, intentando divisar quién era.-

-Harry Potter... ¿Qué hace él ahí? -Me asomé un poco más, y escuché una voz masculina, a mis espaldas.- 

-Señorita Lestrange. -Era el director. Albus Dumbledore, creía recordar. Me giré sobresaltada.- 

-P... Profesor Dumbledore... -Di unos pasos hacia atrás, separándome de la enfermería.- Buenos días, señor. -Asentí, con educación.- 

-Buenos días, señorita Lestrange. http://img23.imageshack.us/img23/4636/kyrf.gif ¿Qué hace aquí? -Se asomó un tanto a la puerta.- Oh... ¿Ha venido a ver al señor Potter? http://img24.imageshack.us/img24/8411/k7k.gif

-No, señor... Tan solo pasaba por aquí, y... -Me encogí de hombros.- ¿Qué le ha pasado? ¿Son ciertos los rumores? -Achiqué los ojos.- 

http://img443.imageshack.us/img443/8859/p40.gif Me temo... Que sí. 

-Entonces el profesor Quirrell... ¿Era... Voldemort?

-Sí... Y no. http://img545.imageshack.us/img545/8238/c00.gif

-Vaya... -Miré el interior de la enfermería, intentando quitarle importancia a la conversación. Al final mis sospechas eran las ciertas. Y las de Snape... Nunca fue él. Lo sabía. Él no era malo. Sonreí levemente, aliviada. Un movimiento se percibió en la cama de Potter. http://img208.imageshack.us/img208/8573/if9.gif - 

-Si me disculpa, señorita Lestrange... El señor Potter ya se ha despertado. Tengo que tratar con él un par de asuntos. http://img41.imageshack.us/img41/1934/n1f.gif -Sonrió leve, guiñándome un ojo.-

-Claro, señor. -Le devolví la sonrisa, y asentí conforme.- Yo ya me iba. -Me giré suavemente, para marcharme.- 

-Señorita Lestrange. -Dijo Dumbledore, interrumpiendo mi marcha. Me giré repentinamente, y le miré- 

-¿Sí, profesor?

-Pásese luego por mi despacho. Tenemos cosas de las que hablar. ¿Verdad? - http://img707.imageshack.us/img707/9164/yg.gif . Yo, le sonreí y asentí, de nuevo.- 

-Claro, señor... -Esbocé entonces una sonrisa aún más amable, y le observé, hasta que se introdujo en la enfermería. http://img59.imageshack.us/img59/7877/oonp.gif - 


Harry Potter Magical Wand